En todos los barrios hay una casa así: con sistema de alarma de última generación, sensores de movimiento, luces automáticas y un timbre con cámara. Pero, noche tras noche, la puerta trasera queda abierta.
Los ladrones rara vez entran por la puerta principal. Usan el portón lateral, el garaje con el cerrojo roto o la ventana mal cerrada.
Los ciberdelincuentes hacen lo mismo. No buscan la defensa más fuerte, sino el punto más débil: una integración activa, una contraseña por defecto sin cambiar o un servicio expuesto sin saberlo.
Según un informe de Mimecast de 2025, el 95 % de las brechas de seguridad se deben a un error humano1: alguien, en sentido figurado, olvidó cerrar la puerta.
La seguridad no se limita a la puerta principal: abarca toda la propiedad y todas las posibles vías de acceso.
Cada cámara es como una casa
Imagina que cada cámara es una casa. El cuerpo y el firmware son los cimientos y las paredes. El acceso de administrador es la puerta principal. Los protocolos e integraciones son las ventanas. Las funciones inactivas pero habilitadas son las puertas traseras olvidadas. Y la cadena de suministro del firmware es el sótano: invisible desde fuera, pero esencial para la seguridad.
Cada uno de estos elementos puede ser una entrada protegida o una invitación abierta. Cuantas menos puertas innecesarias tenga una casa, más segura será.
Por eso las cámaras MOBOTIX se diseñan de otra manera. Eliminamos de forma sistemática los posibles puntos débiles desde el principio.
Aun así, las cámaras MOBOTIX siguen siendo compatibles con ONVIF y se integran fácilmente en ecosistemas complejos. Esto reduce considerablemente la superficie de ataque. Cuando aparecen nuevas vulnerabilidades, nuestros dispositivos suelen quedar fuera de riesgo, simplemente porque la “puerta” explotada en otros sistemas no existe en nuestras soluciones.
El arte del equilibrio justo
Uno podría preguntarse: ¿por qué no fabricar una cámara sin puntos débiles? Porque una seguridad absoluta haría que el dispositivo fuera inutilizable. Demasiada protección puede anular su función.
La seguridad es cuestión de equilibrio:
- Demasiado cerrada → inutilizable.
- Demasiado abierta → vulnerable.
Una buena ciberseguridad significa diseñar sistemas fáciles de usar para las personas adecuadas y difíciles de encontrar para las equivocadas. Bloqueos automáticos, controles intuitivos y protecciones que no dependan de la memoria o la experiencia del usuario.
En MOBOTIX, la seguridad no debe sentirse como una carga. La opción más segura suele estar activada por defecto. Si se necesita una integración o función avanzada, se habilita de manera consciente y transparente.
Descarga nuestra guía gratuita
Confianza mediante control: pruebas de penetración en MOBOTIX
Confiamos en nuestros sistemas, pero los ponemos a prueba de forma regular. Realizamos pruebas de penetración y ejercicios de “hacking ético”, simulando los métodos de los atacantes reales.
Este ciclo continuo de pruebas y mejora garantiza que los “cerrojos” de nuestros dispositivos no sean solo teóricos, sino eficaces en la práctica.
Lista práctica para proteger tus cámaras
Si desea evaluar la seguridad de tus sistemas MOBOTIX, sigue esta sencilla lista al instalarlos o mantenerlos:
- Cambia de inmediato las credenciales por defecto
- Desactiva los protocolos y servicios no utilizados
- Activa las integraciones de forma controlada
- Utiliza gestión remota segura
- Actualiza el firmware con regularidad
- Realiza pruebas simuladas de ciberataques
- Mantén un inventario de dispositivos y versiones de firmware
- Ofrece formación regularmente a tu personal
No son recomendaciones teóricas, sino hábitos prácticos que evitan intrusiones oportunistas.
Seguridad que se siente natural
La mejor casa es aquella en la que no hace falta preguntarse si las puertas están cerradas. Uno lo sabe. Los cerrojos se activan solos, las ventanas son seguras y la estructura es sólida. Vivir allí da tranquilidad.
Así debería sentirse la ciberseguridad.
Una cámara MOBOTIX es como esa casa: robusta, bien pensada, con el mínimo de puntos de acceso y mecanismos de seguridad integrados. La seguridad no es un añadido, sino parte del diseño.
Porque, al final, la mayoría de los ataques no entran por la puerta principal, sino por la ventana olvidada.
Así se construye no solo una cámara, sino un hogar seguro para tus datos y tu confianza.

1. https://www.infosecurity-magazine.com/news/data-breaches-human-error/